En un momento decisivo para las relaciones geopolíticas en América del Sur, Venezuela se prepara para realizar este domingo una inédita elección de autoridades en el territorio del Esequibo, una región de 160.000 km² en disputa con Guyana, marcando un nuevo capítulo en este centenario conflicto territorial.
Una votación simbólica en territorio disputado
La peculiaridad de estas elecciones radica en que los 21.403 votantes registrados residen en el estado Bolívar, a más de 100 kilómetros del territorio en disputa. Entre ellos se encuentra Misael Zapara, quien desde El Dorado expresa con convicción: «Merecemos recuperar nuestro Esequibo».
El proceso electoral busca elegir un gobernador, legisladores regionales y ocho diputados al Parlamento para una región que, paradójicamente, está bajo administración guyanesa, sin centros de votación en el territorio disputado.
El Dorado: Un microcosmos de la campaña
En las calles de El Dorado, donde el oro sirve como moneda corriente, la campaña electoral cobra vida con afiches del candidato oficialista Neil Villamizar, ex comandante de la Armada. La propaganda electoral fusiona su imagen con la del presidente Nicolás Maduro y el ministro Diosdado Cabello, simbolizando la unidad del gobierno en esta causa nacional.
Tensiones diplomáticas y reacciones internacionales
La iniciativa electoral ha generado fuertes reacciones en Georgetown. El presidente guyanés Irfaan Ali ha calificado la votación como una «amenaza», aunque también la ha minimizado como «propaganda» venezolana. El conflicto se ha intensificado desde 2015, cuando ExxonMobil descubrió importantes yacimientos petroleros en la región.
Marco legal y disputas históricas
El conflicto se sustenta en dos posiciones legales contrapuestas:
- Guyana defiende el laudo de 1899 que estableció las fronteras actuales
- Venezuela se apoya en el Acuerdo de Ginebra de 1966, que anuló el laudo anterior y estableció bases para una negociación
Tumeremo: Capital provisional y expectativas locales
La designación de Tumeremo como capital provisional del nuevo estado genera esperanzas entre sus habitantes. Rafael ‘Chino’ Velásquez, cronista local de 81 años, expresa su «regocijo» por las elecciones, aunque reconoce la complejidad del conflicto: «Guyana ha dicho que no le entregaría ni un milímetro, ni una pulgada a Venezuela».
Aspiraciones de desarrollo regional
Más allá de las reivindicaciones territoriales, los habitantes de la región ven en estas elecciones una oportunidad de desarrollo. Como expresa Alirio Páez, soldador de 68 años: «Vamos a ser un estado y en consecuencia vamos a tener un situado constitucional para que podamos salir de esta situación rural».
Impacto en la política nacional
La votación se desarrolla en un contexto político complejo:
- La principal coalición opositora ha llamado al boicot
- Un sector disidente de la oposición participa en los comicios
- Se eligen simultáneamente 24 gobernadores y 285 parlamentarios
Esta elección representa no solo una reivindicación territorial sino también un momento crucial en la política interna venezolana, donde las aspiraciones nacionales se entrelazan con las necesidades de desarrollo local en una región históricamente marginada.
